El embarazo

Para una mujer , el embarazo representa un período lleno de emociones muy fuertes que la acompañan a lo largo de los nueve meses de gestación.

Los seres humanos pertenecen a la clase de los mamíferos, organismos vivos que, después de dar a luz a sus hijos, los cuidan hasta considerarlos capaces de valerse por sí mismos.
El período de gestación tiene una duración de nueve meses, que se pueden dividir en tres cuartos, los cuales tienen características muy diferentes.

cuarto

Este es quizás el período más delicado de todo el embarazo ya que la futura madre toma conciencia de su nuevo estado, lo que le traerá grandes cambios tanto físicos como psíquicos.
En estos primeros meses tu cuerpo no sufre cambios evidentes ya que la barriga aún no se ve y los senos aumentan de volumen de forma moderada; las hormonas afectan tu esfera psicoemocional y por lo tanto puedes sentirte extraño y ansioso. A menudo experimentará náuseas matutinas que, con un régimen nutricional correcto, disminuirán.
Su peso corporal no debería aumentar más de tres o cuatro libras.
Si estás ante el primer trimestre de gestación trata de vivirlo con la máxima relajación, recordando que es absolutamente normal tener sentimientos encontrados.

II Trimestre

Del cuarto al sexto mes seguro que estarás muy bien, tanto porque ya estás acostumbrado a tu nuevo estado, como porque las molestas náuseas que te aquejaban en el trimestre anterior tienden a disminuir y por fin puedes empezar a pensar serenamente en el bebé que pronto nacerá. Presta especial atención a tu alimentación ya que tu peso tenderá a aumentar de forma importante en el segundo trimestre y debes procurar que este aumento no supere los diez kilos.
Emocionalmente, probablemente también estará más tranquilo.

III Trimestre

Se acerca el momento del parto, cuando finalmente podrá sostener a su bebé en sus brazos. En el último trimestre tu cuerpo alcanzará su valor máximo de peso, debido a que el feto está alcanzando su tamaño final; incluso en este período usted es muy cuidadoso con su dieta, que debe ser saludable y de fácil digestión para no sobrecargar su metabolismo, que ya está severamente limitado por la condición que está experimentando. Emocionalmente, quizás vuelvan a aparecer episodios de ansiedad, pero estos son fenómenos absolutamente normales.

Importancia de la nutrición en el embarazo.

Durante los nueve meses de embarazo es fundamental prestar especial atención a la alimentación, para garantizar el máximo bienestar fisiológico tanto de la futura madre como del bebé.

Se puede decir que no existe un protocolo dietético real para la mujer embarazada, ya que, por regla general, no hay contraindicaciones para ningún alimento (salvo casos de patologías orgánicas en toda regla), ni hay necesidad absoluta de otros; simplemente es necesario procurar que la alimentación sea equilibrada, completa desde el punto de vista cualitativo y suficiente desde el punto de vista cuantitativo, teniendo en cuenta las necesidades de la nueva criatura que se está formando.

Es muy importante que hagas tus comidas con regularidad, evitando omitirlas cuando te sientas mal (por ejemplo, si tienes náuseas en el primer trimestre), y también consumir una cantidad exagerada de alimentos, porque perderías por completo el control de tu nutrición general. a diario. Durante todos los trimestres es de fundamental importancia mantener un balance energético equilibrado, que debe estar entre 2500 y 3000 calorías diarias. Recuerda que la mayoría de los nutrientes que introduces son utilizados por el feto para su formación y para el crecimiento de su cuerpo; toma todo lo que necesita de su cuerpo. Por lo tanto, si cierta sustanciano está disponible en cantidad suficiente, usted será el más afectado por esta deficiencia, con peligrosas consecuencias metabólicas; cualquier desnutrición, aunque dañina para el feto, tendrá consecuencias debilitantes principalmente en tu organismo.
Una dieta equilibrada también es de enorme valor para la formación de la placenta, el órgano que asegura las mejores condiciones homeostáticas para el feto.

¿Cuál debe ser el régimen dietético en el embarazo?

Son dos los requisitos principales que debe tener una correcta dieta durante el embarazo: por un lado, aportar al feto todos los nutrientes esenciales para su desarrollo, y por otro, no sobrecargar demasiado el cuerpo de la madre.

Es bien sabido que durante la gestación tendrás que “comer por dos”, aunque esta afirmación no sea del todo correcta; de hecho si lo hicieras así, en el momento del parto habrías engordado demasiados kilos.
Por eso es fundamental contar con una dieta calibrada, que te garantice un aporte calórico correcto, variado y de fácil digestión y sobre todo que sea capaz de aportar todos los nutrientes útiles para un correcto desarrollo del niño.

Las principales sustancias que componen los alimentos pertenecen a tres categorías: proteínas, carbohidratos (azúcares) y lípidos (grasas).

Proteínas

Cuando se tienen que formar nuevos tejidos, es necesario tener una cantidad considerable de proteína; en tu dieta a lo que debes prestar más atención es al contenido proteico de los alimentos. Recuerda que el requerimiento diario de proteínas ronda los 100 gramos en los primeros seis meses, que aumentará a 120 gramos en los últimos tres meses.
Dado que es necesario que el equilibrio entre los distintos aminoácidos que componen las proteínas sea óptimo, necesitarás tomar proteínas tanto de origen vegetal como animal.
Las principales fuentes de proteínas animales.las puedes encontrar en la carne, preferentemente blanca (pollo, pavo y conejo), en el pescado (excelente el pescado azul como las sardinas, ya que es muy rico en ácidos grasos omega 3), en la leche y derivados (preferir los bajos en grasas). quesos como crescenza, robiola, ricotta, requesón y quartirolo, ya que son de muy fácil digestión) y huevos (considera la tortilla de claras como una sabrosa alternativa). La leche en particular es muy importante para el aporte cualitativo de las proteínas que la componen; medio litro de leche al día, preferiblemente desnatada, representa una dosis óptima en tu dieta. Se pueden encontrar
excelentes proteínas vegetales en legumbres como los frijoles, los garbanzos y la soya.

carbohidratos

La ración diaria de hidratos de carbono no debe superar los 7-8 gramos por cada kilo de peso corporal; es recomendable no superar nunca este límite para limitar la tendencia al sobrepeso, ya que durante el embarazo la acumulación de peso corporal también puede acarrear consecuencias negativas para el feto. Recuerda que cualquier complicación durante el parto (parto anormal o toxemia del embarazo) es más frecuente a medida que aumentas de peso.
Así que trata de dar preferencia a los azúcares complejos, preferentemente sin refinar, y sustituye, cuando sea posible, el azúcar porla miel, que es un alimento natural muy digerible, de fácil asimilación y con un contenido calórico equilibrado.
Una dieta óptima durante el periodo de gestación debe incluir porciones de pasta de 50 gramos como máximo, aliñadas con tomate y una cucharada de aceite de oliva virgen extra (dieta mediterránea). Trate de comer muchos cereales integrales, como espelta, cebada, avena, centeno, trigo sarraceno, sorgo e incluso arroz, posiblemente rojo o negro. Limite lo más posible al pan blanco, que puede reemplazar con pan de centeno, bizcochos integrales o pasteles de arroz,muy ligero y sabroso. Evita en lo posible cualquier tipo de postre, ya que son extremadamente altos en calorías, que puedes sustituir por fruta fresca de temporada, incluso en forma de sabrosos batidos con yogur o leche de soja.

lípidos

En cuanto a los lípidos, habrá que limitar al máximo los de origen animal (mantequilla, manteca de cerdo, manteca de cerdo), sustituyéndolos por los de origen vegetal (aceite de soja, aceite de cacahuete, aceite de maíz, aceite de girasol, semillas varias). Limitar también al máximo el consumo de embutidos grasos, sustituyéndolos por magros, como la bresaola (muy rica en proteínas), la pechuga de pavo al horno, y el jamón cocido y crudo completamente desgrasado.
Elimina las frituras, ya que aumentan los tiempos de digestión y ralentizan tu metabolismo.
Un alimento que no debe faltar en tu dieta durante los nueve meses de gestación es el aceite de oliva virgen extra,ya que es especialmente rico en ácidos grasos insaturados y polifenoles, que tienen una acción antioxidante muy importante.

Por último, recuerda que las vitaminas también son de fundamental importancia para tu bienestar y el del feto, por lo que procura introducir cantidades suficientes para evitar peligrosas carencias.